lunes, 20 de mayo de 2013

Boa constructora

Las personas con discapacidad también tienen derecho a jugar y pasarla bien, pero muchas veces ven limitada su participación porque lo juegos no están adaptados para su nueva condición. Es por eso que como Terapeutas Ocupacionales debemos ser capaces de adaptar los ambientes y los objetos que utilizan las personas con discapacidad o bien crear nuevos dispositivos para mejorar las condiciones de vida y puedan tener una plena participación en los diferentes contextos en los que se desenvuelven. La sesión de hoy 14 de Mayo, estuvo destinada precisamente a eso, a la creación de un juguete pensado para una persona con algún tipo de limitación. En nuestro caso era un niño de 6 años con poca interacción social a quien le gustaba mucho los juegos de lego, puzles y jugar con el celular del papá.

En base a la poca interacción que tenía el niño decidimos confeccionar un juguete cuyo objetivo sería mejorar la interacción social del niño con sus pares. Para ello establecimos ciertos criterios para la construcción del juguete: Primero dijimos que tiene que ser un juego que sí o sí deba ser jugado por dos o más jugadores, pero nunca individual, pues buscamos precisamente la interacción con otro. Segundo, debía estar enfocado a los intereses del niño, es decir, construir algo relacionado con construcción con legos, puzles o tecnología. Como no contábamos con suficientes materiales, decidimos construir un ludo modificado, con colores y formas muy llamativas. Tiene la misma dinámica de un ludo tradicional, es decir, cuatro postas de partida y cuatro de llegadas y con un camino en común para todos. La diferencia es que dentro del camino se incorporaron desafíos de construcción (estrellas pintadas en el tablero), el jugador que cae en una de estas casillas deberá sacar una tarjeta que le dirá el tipo de figura que deberá construir, de acuerdo al color que la tarjeta tenga y la forma de la misma, Tal como lo muestra la foto. El jugador deberá tomar todas las piezas del color indicado en la tarjeta y armar la figura, para ello se le dará un tiempo de un minuto, si no es capaz de realizarlo durante este tiempo, perderá un turno. Por otro lado, existe también una casilla de color negro con una calavera, aquel jugador que cae en esta casilla perderá tres turnos. El primer jugador en llegar al final del camino donde inició ganará el juego. Acá les dejo una fotografía del tablero:



La verdad es que no fue muy fácil la construcción. Primero porque no se nos ocurría que tipo de juego realizar y segundo por el poco tiempo de ejecución. Sin embargo, quedamos muy conformes con nuestro trabajo y nos dimos cuenta que trabajando en equipo, utilizando un poco de imaginación, coordinación y buena disposición podemos crear grandes cosas.  Ahora esperamos que nuestro juego sea de agrado para el curso y logren disfruten tanto como lo disfrutamos nosotros, o al menos como yo lo disfrute. Lo siento casi como un hijo que fue creado con mucha dedicación y cariño.

En fin disfrute mucho realizando la actividad!!!

domingo, 12 de mayo de 2013

Adaptando un mouse

Poco antes de terminar la semana el delegado de creatividad nos dice que tenemos que comprar algunos materiales para la actividad del día martes 7 de mayo. Todos ellos tenían nombres extraños y más de alguno no sabíamos lo que nos estaban pidiendo. Estos eran los materiales, no recuerdo sus nombres pero acá dejo la fotografía:


Como curso nos organizamos y unos compañeros gentilmente se ofrecieron a comprarlos, si no hubiese sido por ellos no hubiese llegado el día martes con los materiales.

Personalmente tenía más o menos una idea de lo que se iba a tratar la actividad ya que una de mis amigas había hecho este mismo trabajo en un CFG, pero no es lo mismo que te cuenten como se realiza una cosa a tener la oportunidad de realizarlo. Fue entonces que ese día una alumna en práctica de nuestra misma universidad se ofreció gentilmente a enseñarnos a “Adaptar un mouse” para personas con movilidad reducida. La idea era simplificar la función del mouse y permitirle su función con sólo un clic. Para ello, debíamos crear en primera instancia el sistema de clic simplificado, este consistía en unir la parte de clic con el cable de parlante y el conector macho (la verdad no recuerdo los nombres). En la parte del clic se debía poner una esponja o tapa de café para poder hacer el clic, yo use una esponja y mi sistema quedo así:


Posteriormente debíamos abrir el mouse para comenzar a adaptarlo, una vez abierto había que conectar otro trozo de cable al clic izquierdo del mouse y soldarlo, previo a este paso se debía realizar un orificio en el mouse para pasar el cable, finalmente se armaba el mouse, se cerraba bien y en la parte distal del cable que no tenía nada se le colocaba la entrada hembra para poder conectarlo con la adaptación que en la primera etapa ya habíamos realizado. Todas las conexiones que hicimos se realizaron con soldadura para asegurar que el sistema funcionase. 


Para finalizar debíamos pasar la prueba de fuego “que la adaptación funcionase”, lo cual en mi caso tristemente no funcionó. Por lo que tuve que revisar de nuevo todas las conexiones. Arreglé algunas cosas que consideraba estaban malas y mi sistema adaptado funcionó, pero mi mouse no funcionaba, se acabó el tiempo y no pude arreglarlo, pero cuando llegue a mi casa tomé nuevamente mi mouse y comencé a revisarlo y la falla estaba en la conexión con la entrada hembra, lo soldé nuevamente y mi mouse quedó funcionando sin problemas y así quedó finalmente el circuito terminado:



Feliz quedé con mi trabajo terminado, me costó pero al fin y al cabo resulto. Ahora puedo contar con una herramienta fácil de construir, económica y que aporta muchos beneficios a la persona con movilidad reducida que tiene la oportunidad de ocuparla.

A modo de conclusión puedo decir que las tecnologías y en particular las ayudas técnicas son estrategias de adaptación que pueden aportar en gran medida al proceso de integración social y a la mejora del funcionamiento de las personas con discapacidad. Los ayuda a participar en el mundo en el que están insertos y facilitan no sólo las actividades del individuo que las usa sino que facilita también la vida de las personas que los rodean. Hoy hicimos una adaptación simple pero con paciencia, ingenio y recursos se pueden realizar adaptaciones que cambien en 180° la vida de las personas con discapacidad.



jueves, 2 de mayo de 2013

Expresión corporal


El cansancio, el estrés y la fatiga mental hace que muchas veces no disfrutemos de las cosas bellas de la vida, normalmente nos encasillamos en esas situaciones y no vemos más allá de lo que nuestros ojos nos permiten ver. Limitamos nuestros movimientos y por sobre todo limitamos nuestra expresión y comunicación tanto corporal como verbal. Es importante que como seres humanos digamos “cosas” con nuestra corporalidad, comunicar a un otro lo que sentimos, pensamos y hacemos. En la sesión de hoy eso fue precisamente lo que fomentamos “la comunicación corporal”  Primero comenzamos con una pequeña dinámica de movimientos básicos siguiendo los patrones que la profesora realiza en torno a un par de zapatos, debíamos movernos como ellos lo hacía. Para ello, debíamos previamente formar parejas y estar dispuestos a participar. Posteriormente relajamos nuestros cuerpo con soltura de articulaciones, movimientos libres, diferentes tipo de caminatas sin tocarse con el otro, tocándose solo del hombro, tocándose con el codo y finalmente tocándose con  la cadera.


Una de las actividades que más me gusto fue el contacto espalda a espalda que tuvimos con uno de nuestros compañeros de curso. Me agradó mucho esa situación, no sólo porque me reí sino que también porque se relajaron mis músculos, nos comunicamos (sentimiento de alegría, pena, rabia, agradecimiento) y nos divertimos demasiado, sobre todo en la parte donde teníamos que discutir con las espaldas, sentí que era potente nuestra pelea, pero todo dentro de un contexto de respeto y con el fin de pasarla bien.

La actividad central consistía en formar cuatro grupos de compañeros dentro del curso y cada grupo debía escoger un tema que eran: Maquillaje, entrega, libre y movimiento. A mi grupo en particular le tocó movimiento y en verdad ninguno de nosotros quería mucho este tipo de tema, por el el tema de la timidez y la vergüenza. Finalmente accedimos a participar y debíamos crear una especie de coreografía y actuación con los movimientos corporales. En un comienzo nos costó bastante ponernos de acuerdo pero al final concretamos algo. Utilizamos diferentes tipos de telas -en cuanto a color y a longitud- para potenciar aún más los movimientos que estábamos realizando. Cada uno cumplia su función. A mi me toco bailar fuera del círculo que habíamos formado con las telas e iba tocando las cabezas, los hombros o cualquier otra parte del cuerpo de mis compañeros que estaban formando el círculo para que comenzaran ellos a moverse, los instaba al movimiento, a despertar su expresividad. Una vez que todos estuvieron conectados y expresando, me introduje bajo las telas y junto a otros dos compañeros más comenzamos a danzar y crea movimientos improvisados. Resultó algo muy lindo y entretenido, a pesar del poco tiempo de preparación y el rechazo con respecto al tema en un principio.

Después cada grupo presentó su tema con diferentes temáticas como la metamorfosis con orugas y mariposas, la historia del vino en un pueblo donde había sequía y la música para crear un ambiente relajante. Todos y cada uno de ellos dejaron en evidencia la creatividad que puede aflorar desde los seres humanos y que con pocas herramientas y el poco tiempo, se pueden construir cosas hermosas y muy agradables de ver.

A modo de reflexión siento que de alguna u otra manera nos comunicamos y que esa comunicación la mayoría de las veces lo dice el cuerpo que vale más que mil palabras.